Si estás alojado en el Mar Muerto, a 416 metros por debajo del nivel del mar, y te dicen que al día siguiente, a escasos kilómetros te van a enseñar un pequeño oasis donde se practica barranquismo, no te lo crees. Es realmente difícil de imaginar debido al clima tan duro y a las temperaturas tan altas que se sufren en esa zona de Jordania. Pero sorprendentemente existe y es una auténtico vergel en medio del desierto.
Esta maravilla es la Reserva de la Biosfera de Mujib, una serie de cañones, moldeados por las lluvias en el altiplano que fluye hacia el Mar Muerto, cuya extensión es de 220 kilómetros cuadrados. Por lógica, debido a su ubicación, es la reserva a menor altura del mundo. Es un lugar perfecto para los amantes del barranquismo y deportes de aventura. Durante todo el recorrido que hagamos (hay diferentes opciones), podremos caminar, nadar, bajar toboganes naturales y dejarnos llevar por la corriente rodeados por las montañas que cubren el desfiladero, llegando algunas de ellas a los 1000 metros de altura. Una experiencia fantástica en plena naturaleza y en un paraje único.
La importancia de Wadi Mujib se remonta a los tiempos bíblicos (cuando era conocido como el río Arnón), y su terreno montañoso sigue siendo un hábitat crucial para la vida silvestre, incluyendo 10 especies de carnívoros (como el Caracal) y numerosas especies nativas y migratorias de aves.
Se me hizo extraño encontrarme de repente en un paraje natural tan increíble, teniendo en cuenta que el 84% del territorio de Jordania es desierto puro y duro. Wadi Mujib lo podría haber imaginado en cualquier otro lugar con un clima más parecido al nuestro, pero nunca en este país asiático. Es una sensación única poder disfrutar de ese paisaje tan agreste. Debido a las altas temperaturas, es muy recomendable tomarse la excursión con calma y disfrutar de la naturaleza.
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- Siq Trail (es la que realicé yo). Son dos horas más o menos de marcha y se puede realizar del 1 de abril al 31 de octubre. Es la opción más sencilla de todas. Abierto de 8:00 a 16:00). Se puede realizar sin guía y sin hacer reserva previa con un coste de 20JD. Si queréis guía cuesta 35JD.
- Ibex Trail. Se puede realizar todo el año, ya que es la única excursión terrestre y suele durar unas 4 horas. Su dificultad es media y las horas de salida son entre las 8 y las 10 de la mañana. En esta caminata se puede contemplar la famosa roca de la mujer de Lote. La leyenda dice que al huir de los pueblos de Sodom y Gomorrhe, la mujer de Loth no escuchó la advertencia de no darse la vuelta y se transforma en estatua de sal.
- Barranco Trail. Se puede realizar del 1 de abril al 31 de octubre. Es de alta dificultad y tiene una duración de 4 horas. Las salidas son a las 8 de la mañana y el acompañamiento del guía es obligatorio.
- Malaqui Trail. Es la más larga de todas, ya que puede durar entre 7 y 8 horas. Se puede realizar del 1 de abril al 31 de octubre. También es de alta dificultad y por eso también es imprescindible el acompañamiento de un guía. Las salidas son a las 8 de la mañana. Es la más recomendable para los aficionados al barranquismo en condiciones extremas.
Algunos consejos prácticos
- Llevar calzado adecuado (muy recomendable escarpines) y muy ligeros de ropa, bañador a ser posible. Las temperaturas son muy altas y os sobrará el resto de prendas nada más empezar.
- No intentéis subir o bajar algunos tramos por vuestra cuenta. Todos están señalizados y tienen cuerdas y escaleras para ayudaros, pero la experiencia y consejos del guía son muy buenos para no sufrir ningún percance. Aunque algunos tramos parecen muy fáciles, la corriente del agua es muy fuerte y os puede crear problemas.
- El uso del salvavidas es obligatorio. Os lo darán en la entrada del Siq.
- Si es posible, llevar alguna mochila con agua. Aunque estéis a remojo, es muy recomendable hidrataros de vez en cuando.
- Si pensáis llevar cámaras o teléfonos, que sean sumergibles o que lleven funda para que no se mojen.
- Para llegar a Wadi Mujib, siempre hacerlo en coche privado. El transporte público a esa zona no llega y los taxis son bastante caros, ya que las ciudades más cercanas están bastante lejos. Amán, la capital de Jordania, está a 90 kilómetros de distancia hacia el sur.